El apego es el vínculo emocional que desarrolla el niño/a con sus padres o cuidadores y que le proporciona la seguridad indispensable para un buen desarrollo de la personalidad.
Su función es asegurar el cuidado, el desarrollo psicológico y la formación de la personalidad.
El apego en la infancia tiene un papel primordial, ya que tiene una función adaptativa tanto para el niño o la niña y para las personas encargadas de su cuidado.
- A nivel biológico nos sirve para asegurarnos la supervivencia cuando somos bebés.
- A nivel psicológico nos aporta seguridad.
TEORÍA DEL APEGO (Jhon Bowlby)
La tesis fundamental de esta teoría se basa en que el estado de seguridad, ansiedad o temor de un niño/a está determinado en gran medida por la accesibilidad o capacidad de respuesta de su principal figura de apego.
Esta teoría explica las consecuencias que tiene sobre un niño o niña la separación prematura de sus padres o cuidadores:
- Perjudica la capacidad del niño/a para sentinrse seguro/a y explorar su entorno.
- Tiene efectos sobre el desarrollo de la personalidad.
- Incapacidad para formar relaciones profundas con otros.
Existen dos tipos de apego:
APEGO SEGURO
- La comunicación es cálida y sensitiva.
- Los cuidadores permiten una adecuada autonomía según la edad del niño/a.
- Hay flexibilidad en la proximidad, operan independientemente pero de vez en cuando se tocan.
- Existen interacciones placenteras entre el niño/a y el cuidador/a.
APEGO INSEGURO
Existen tres tipos de apego inseguro:
- Apego evitativo.
- Apego ambivalente.
- Apego desorganizado.
APEGO EVITATIVO
Las características de la relación entre el cuidador/a y el niño/a son las siguientes:
- El cuidador responde negativamente a los intentos del niño de tener contacto: el cuidador se retrae cuando el niño/a está triste.
- El niño muestra más angustía en casa que en el encuadre de estudio.
- Las conductas de juego parecen servir como distracción de las necesidades de apego.
APEGO AMBIVALENTE
Características relacionadas con la interacción entre el cuidador/a y el niño/a:
- El cuidador está emocionalmente indisponible aunque aparentemente está centrado en las tareas de crianza.
- El niño ha aprendido que su cuidador responderá si el persiste en llamar su atención.
APEGO DESORGANIZADO
Los niños exhiben conductas aparentemente no dirigidas hacia un fin, dando la impresión de desorganización y desorientación.
Estos niños manifiestan inmovilización, golpeteo con las manos y el deseo de escapar de la situación extraña, aún en presencia de los cuidadores.
Hablamos de todo esto porque el apego no es inmutable ni se mantiene en la misma medida con todas las personas que un o una peque conozcan a lo largo de su infancia.
Todos los niños, niñas y adolescentes, pueden aprender las conductas asociadas al apego seguro, llegándose a instaurarse un vínculo que aporta seguridad y cuidados.
Lo importante es desarrollar estrategias cuando llegue un o una menor a nuestro domicilio mientras somos familia de acogida:
- Mostrarnos seguros y afectivos.
- Predecibles a través de hábitos y rutinas.
- Poder observar, registrar y reflexionar sobre aquello que le bloquea, pero también qué le desbloquea y le relaja.
- Mantener metas cortas y reforzadas.
- Pedirnos ayuda al Servicio de Apoyo al Acogimiento Familiar de Menores, para solventar cualquier duda o problemas que tengas.
- Recordar, que si somos capaces de aportarles seguridad y estabilidad, la duración de las conductas disruptivas, la frecuencia con las que las muestra y la intensidad con las que lo hace, irán disminuyendo con el tiempo.
Gracias al apego seguro, que está garantizado por incondicionalidad, podremos darle a estos niños, niñas o adolescentes acogidos, seguridad, además de que puedan sentirse queridos, aceptados y valorados.
Es importante ser constantes en los cuidados y que exista una persona que esté pendiente y preocupada por su seguridad y por comunicarse con ellos o ellas.
Gracias a esta repetición, podremos comenzar a ver a menores con comportamientos activos de exploración, sin miedo a las reprimendas; además, podrán interactuar de manera confiada con el entorno.
La parte más importante en el acogimiento familiar, es que los y las acogedoras sean capaces de reconocer el mensaje de ayuda que nos mandan con sus comportamientos desajustados.
Recuerda que siempre puedes contar con nuestro equipo, para ayudarte durante tu acogimiento familiar. No dudes en ponerte en contacto con nosotros.